Cuando llega la hora de buscar un sistema de retención infantil para nuestros hijos, todos los padres nos informamos, leemos, buscamos, preguntamos... Como padres queremos que nuestros hijos estén seguros, nosotros hicimos lo mismo, buscar y buscar información, por eso decidimos no comprar un sistema de retención, sino un sistema de seguridad, una silla a contra marcha acorde a nuestras necesidades.
Reconozco que con Curcuhuete no estuve tan informada. Al salir del hospital le llevamos a casa en el cuco del carro, después compré un grupo 0, que agotó bastante rápido porque era un bebé grandote, antes de agotarlo me regalaron una silla grupo 0/1, que solo pudimos usar a contra marcha hasta sus 13kg, después comenzó a viajar a favor de la marcha. Como era, y es, un niño grande, con tres años le compré un grupo 2/3, que es el que aún continúa utilizando, y que seguirá usando hasta que llegue al 1´50m, que poquito le falta. Cada vez que recuerdo el camino del hospital a casa, los viajes en su grupo 1... no puedo más que estar agradecida de no haber tenido ningún accidente.
Curcuhuete está a punto de cumplir 10 años, y por aquel entonces no tenía ni la mitad de la información de la que dispongo ahora, ni tan siquiera tenía en casa acceso a internet, así que me dejaba aconsejar por los profesionales de las tiendas de puericultura. A día de hoy las cosas han cambiado mucho, tenemos internet en casa y acceso a mucha información, una más certera, otra menos, pero información al fin y al cabo, así que cuando llegó el momento de ponernos a pensar en cómo íbamos a hacer seguros los trayectos en coche de Comino nos pusimos manos a la obra. Así fue como conocimos la página a contra marcha, y así fue cómo decidimos que Comino viajaría a contra marcha el mayor tiempo posible.
Tras mucho leer e informarnos, y al pensar que nuestro pequeño nacería muy grandote, decidimos exprimir el grupo 0 hasta agotarlo para poder tener más posibilidades a la hora de escoger silla de seguridad.
Yo no soy experta en el tema, ni quiero hablar de marcas en esta entrada, así que no voy a poder dar mucha más información al respecto, salvo la evidente, la de que en caso de frenada o de impacto, el cuello siempre se lleva la peor parte, y si los adultos (que tenemos una fuerte musculatura y un peso de la cabeza en relación al resto de nuestro cuerpo menor que la de los niños y bebés) sufrimos el llamado "latigazo cervical" que tantas molestias nos causa, no hay que hacer mucho esfuerzo para imaginar las consecuencias que eso puede tener en los más pequeños. Para acercaros a una mejor información, podéis entrar en la página de a contra marcha, e informaros a través de su blog, twitter, foro o facebook, o en la página de facebook "A contra marcha salva vidas", donde sus asesores podrán responder a vuestras dudas y ayudaros a encontrar la mejor silla para vuestros hijos, tan solo aportando unos datos básicos como son el sexo, la edad, el peso y la medida de vuestros peques y el modelo de coche en el que irán, porque "la mejor silla" no existe, existe la que mejor se adapte a vuestros hijos, a vuestro coche, y que mejor y más largo uso pueda ofreceros.
Hay muchas tiendas especializadas en las que podrán asesoraros de forma individual y podréis probar las diferentes opciones, en cualquiera de las páginas que os he mencionado podrán ayudaros a encontrar la más cercana a vosotros.
A Comino le encanta su nueva silla, sigue estando al lado de su hermano (que le hace muy amenos los viajes) y ahora, al ir más alto que en el grupo 0, puede ver no solo por la ventanilla, sino por la luna trasera y a través del espejo. Como podéis ver está encantado y muy cómodo en su silla nueva, que le acompañará hasta que ya no necesite usar más sistema que el cinturón de seguridad.
Esperamos no tener que comprobar nunca la eficacia de nuestra silla, pero como los accidentes son impredecibles, estaremos tranquilos de haber escogido la opción más segura.
¡Gracias a todos los profesionales que nos han ayudado a dar con la silla perfecta para nosotros!
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